Se llama así debido a las espeluznantes aguas termales burbujeantes, el duro paisaje y el clima gélido y nevado de la zona. Jigokudani se traduce como «Valle del Infierno». La nieve cubre el suelo más de cuatro meses al año y el valle está bordeado de acantilados irregulares que se elevan más de 700 metros del nivel del mar.
El parque es famoso por su población de macacos japoneses, también conocidos como monos de nieve, los primates no humanos que viven más al norte.
En algún momento a principios de los años 60, estos inteligentes personajes decidieron probar las aguas de las aguas termales naturales, y desde entonces han descendido del bosque para calentarse en su humeante descubrimiento cada invierno. Algunas de las aguas termales incluso alcanzan temperaturas superiores a los 122 grados Fahrenheit, lo que es perfecto para calentar a los monos y a los visitantes de la región.
Aunque técnicamente no es un sitio religioso, los monos de nieve son populares en las fábulas japonesas y se cree que son mensajeros de los dioses shintoístas de las montañas y los ríos. Aunque la región es remota, no hay duda de que ver monos en un retiro de spa es probablemente una experiencia surrealista y espiritual en sí misma.
El parque de monos Jigokudani está ubicado cerca de la ciudad de Yamanouchi. La ciudad grande más cercana es Nagano, que está a entre 40 y 45 minutos. Puede encontrar una lista exacta de los horarios de los autobuses hacia/desde el parque de los monos de nieve en la estación de tren de Nagano.
Los monos se alimentan durante la mañana, luego se bañan en las aguas termales y luego se van a dormir durante la noche, por lo que es mejor visitarlos desde temprano hasta el mediodía para poder ver tanto el frenesí de alimentación como el baño.
El parque se puede visitar durante todo el año, pero el invierno es la mejor época para visitarlo, cuando todo está cubierto de nieve.
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Fuente: «Jigokudani Monkey Park». atlasobscura.com, (n. d.). Web. 13 de abril de 2021. Foto © Zekkei Japan.